Manual del fotógrafo silvestre, 1 y 2
Primeras dos entregas de este emotivo y didáctico apartado del poemario “David en Maravillapan”
Manual del fotógrafo silvestre 1
El ser humano camina por el mundo
sembrando muerte a su paso,
sin embargo, puede en el transcurso
permitirse admirar algunos dulzores.
La corola de una planta,
un charco ordinario,
hospedan la tertulia de los escarabajos
o el osario de las arañas.
Aunque las mariposas negras
parecen más felices en compañía
sólo se puede ver
a los animales que se equivocan.
El moverse a través del bosque
impide ver el movimiento del bosque
En algunos senderos
sólo saben del sol
por su calor.
En el fondo de la hojarasca algo palpita.
Algo cuelga de una telaraña,
para su bien o para su mal.
Manual del fotógrafo silvestre 2
Entrarás al reino de lo verde.
Cuando salgas
del reino de lo verde
vas a entrar
al reino de la tierra.
Te conducirá el agua
aunque vaya al sentido opuesto
Dejarás de ser niño
y podrás hablar con extraños
con los rostros, los cuerpos
que des cubrieron tus ojos
que los dejaron ser vistos.
Tendrás dos ojos
uno para ver lo que conoces
otro para ver lo que no
mira lo que conoces, mira lo que no conoces
con el primero, con el segundo ojo
¿era lo que conoces? Ahora lo conoces
El camino es como una gran palabra que, por suerte, no puede ser pronunciada con un sólo aliento, que dura muchas horas y cambia según lo hayas recorrido y evitado. Es como pronunciar la palabra “mundo” y demorar una hora en ello.
